Estando tan próximo el Año Nuevo, un tiempo en el que todos desean lo mejor para el tiempo que comienza, yo no voy a desear que el año que entra sea mejor que el que fenece. No, lo único que deseo para todos (y para mí el primero) es aprender, simplemente aprender, tanto de lo bueno como de lo malo.
Yendo yo una mañana en el autobús, de camino a mi trabajo, me fijé en el tatuaje que una chica llevaba en su brazo. Decía así: “un buen día te da felicidad, un mal día te da experiencia”. Y lo que se dice de un día, puede decirse de todo un año.
Pues ese es mi deseo para 2019: experiencia para saborear la vida.
Por este motivo me gustaría subir hoy a este navío una de esas mercancías que ayudan a elevar el ánimo, en especial cuando las cosas no van del todo bien y aunque te des de bruces contra el asfalto mil y una veces. Se trata de una canción del cantautor cristiano Álvaro Fraile, perteneciente a su disco SOL.FE.ANDO. En el video, el tema es interpretado junto a Migueli.
La solución no está en pasar la vida restaurando
todo lo que pudo o no haber sido y no sabrás
Que el problema nunca sea el resultado
si en cuanto hiciste pusiste tanto todo o más
Si se trata de brillar
que sea siempre para alumbrar
si se trata de seguir
mira el sol,
vuelve a salir
¿acaso alguna vez no ha sido así?
Caer para aprender
aprender a levantarse
levantarse para recuperar le fe
en un nuevo amanecer
El porvenir no puede estar en ir resolviendo
crucigramas, indecisiones,… sostenerse, aguantar o morir
La suerte acompaña si uno echa el resto,
no consiste tanto en acertar como en decidir
Si se trata de brillar
que sea siempre para alumbrar
si se trata de seguir
mira el sol,
vuelve a salir
¿acaso alguna vez no ha sido así?
Caer para aprender
aprender a levantarse
levantarse para recuperar la fe
en un nuevo amanecer
Gracias por ese deseo. En mi caso es parecido, yo deseé saber adaptarme a todo lo que pudiera suceder o recibir.
ResponderEliminar"Be water, my friend"